domingo, 9 de agosto de 2015

Mándame una postal

¡Ya hemos arrancado! Escribo estas palabras desde la estación de Ljubljana, donde en dos horas tomamos el tren a Zagreb.

El diario no está tan al día como debería, pero el poco rato que no es de turisteo y de caminar ciudades, es necesario para descansar y retomar fuerzas, también mentales. Este calor húmedo es agotador.

Aún me queda una entrada bajo el epígrafe preparación que publicar, y es acerca del botón de donar que hay en la columna de la derecha.


La idea no es que donéis para financiarme todo el viaje, que de eso ya me he encargado yo vía ahorro, pero una ayudita nunca está de más. Aunque ciertamente sorprende saber que, con lo que en España me invitaríais a un cubata una noche de fieshta, en Java es lo que te puedes gastar en un día (o en dos si se activa el modo austero).

Más bien lo tengo pensado como una especie de servicio de "petición de postales" del país, ciudad o lugar concreto del que queráis recibirla, y por el que tenga planeado pasar (ver la ruta). ¿Ganas de decorar la nevera con una paradisíaca playa de Malasia, un fiero volcán de Java, un adorable mono de Costa Rica, una sonrisa de un niño ghanés?

No hay una cantidad mínima requerida. Ni máxima, claro. A cambio de vuestra voluntaria aportación y por tanto de vuestra muestra de apoyo, yo os envío la postal pedida a la dirección que me indiquéis por correo electrónico, por el blog o vía Facebook. Lo que me cueste luego enviarla va de mi parte.

En resumen, he intentado dar la posibilidad, a quien buenamente pueda y quiera, de contribuir a esta experiencia, y a la vez de llevarse algo para sí. ¡Espero que tenga buena acogida!

jueves, 6 de agosto de 2015

Ruta

A muchos de vosotros ya os he hablado de ella, otros que no estáis tan cerca no la conocéis, algunos hasta habéis sufrido mis comidas de coco hasta dar con ella, a continuación os la presento, mi ruta Round the World.



Etapa 1 - Europa: interraíl por los Balcanes, de Venecia a Estambul, pasando por las capitales de Eslovenia, Croacia, Bosnia, Serbia y Bulgaria. A partir de hoy mismo, dos semanas y media. En Europa en verano mejor tener los hostales reservados, además voy con un amigo que tiene vacaciones limitadas, así que será la etapa más turista.

Etapa 2 - África: voluntariado con una ONG en Ghana. Tres semanas de septiembre dura el programa al que me he inscrito, de construcción y renovación. Después de cuatro años de estático trabajo de oficina, me apetecía hacer algo más extenuante y con mis propias manos. También espero tener contacto con niños y recibir su cálido agradecimiento de la mano de mi hermana, que hace el programa de childcare en la misma localización que yo.

Etapa 3 - Asia: el barato y mochilero sudeste asiático no podía faltar. Malasia peninsular, Sumatra, Java, Bali, Lombok, o lo que de tiempo en las siete semanas planeadas. Será la etapa más larga y por tanto la más dada a la improvisación, en la que espero atreverme con el couchsurfing y parar unos días para obtener el certificado internacional de buceo en aguas abiertas.

Etapa 4 - América: tres días en Miami visitando a una amiga seguidos de cinco semanas en Centroamérica. En Nicaragua me apetece un workaway, trabajar a cambio de alojamiento y comida. En la recepción de un albergue, con el cultivo de café, en una granja orgánica, donde mejor encaje. La visita a la rica biodiversidad de Costa Rica será la última parada antes de volver a Madrid.

Quizás sea un itinerario demasiado ambicioso para el relativo poco tiempo del que dispongo (o decidí disponer de). Pero no quería tirar por el camino trillado de varios meses por el sudeste asiático o por Sudamérica solamente. Me gastaré un poco más en vuelos a cambio de dar una auténtica vuelta al mundo.

Ya hablaré del tipo de billetes escogidos y demás preparativos más adelante. Tenemos tiempo.

miércoles, 5 de agosto de 2015

Motivación - ¿Por qué viajar?


Probablemente no hay lugar más apropiado que un aeropuerto para explicar los motivos de este viaje. Concretamente, el mayor hub de Europa y el que ha sido casi como mi segunda casa estos últimos años: Frankfurt Airport, el cual me conozco de memoria de las ya incontables veces que me he recorrido sus terminales. A veces, en tiempo récord.

Los que me conocéis sabéis que hace tiempo ya que me contagié con el síndrome del eterno viajero. Empecé guiado en los viajes en familia, continué con el turismo (etílico-festivo podría decirse) por ciudades europeas con amigos en los años de universidad y Erasmus, y me consagré con los greatest hits de los últimos años (Perú 2012, Tailandia 2013, Islandia y USA 2014). Sin embargo, ninguno ha sido, ni será, tan ambicioso como este.

Iba a escribir acerca de la rutina del trabajo, de la monotonía de la vida encarrilada, de esos tópicos que los autores de blogs de viajes que se ganan la vida con ello tanto nombran. Se podría aplicar a mi caso con bastante certeza. Pero no sería justo decir que dejo Alemania por el viaje, eso sería más bien postureo. La decisión de volver a Madrid se debe a otros criterios, y el aprovechar la oportunidad de no tener una fecha de regreso marcada en el calendario (en la teoría) era, y es, una gran motivación. Una de muchas.

Ser un viajero y no un turista. Conocer otras culturas, otras formas de vivir y entender la vida a través de la gente local. Disfrutar de la libertad de elección que da la improvisación y la espontaneidad de no tener nada más planificado que el avión. Dejar atrás la tranquilidad del grupo y los prejuicios de la soledad. Ponerme a prueba en situaciones inimaginables en nuestra zona de confort. En definitiva, en lo que todos los viajeros en solitario coinciden y que ilusiona y asusta a partes iguales: conocerte a ti mismo. (Y, ¿qué será eso exactamente?)

Esta era una experiencia que no quería dejar de hacer una vez en la vida. Muchos pensarán que es un lujo, una imprudencia, o un derroche de dinero. Para mí, un lujo es vivir a crédito, una imprudencia es no aprovechar el aquí y el ahora, que es lo único seguro, y un derroche de dinero es un Mercedes o un BMW.

Como dice el vídeo: ya habrá tiempo de asentarse y de formar una familia. O no. De aprovechar las dos o tres semanas de vacaciones al año para seguir descubriendo mundo, mientras la economía y la salud lo permitan.



En la próxima entrada os presento la ruta. Que se me echa el tiempo encima.

martes, 4 de agosto de 2015

Presentación

Primera publicación de este mi blog. Bienvenidos.

Esto es algo que tenía en mente desde hace tiempo, pero últimamente he tenido poco tiempo. Las mudanzas no suelen ser fáciles, y si hablamos de un cambio de país, menos aún.

Excusas aparte, el primer paso de este pequeño proyecto personal ya está dado. Prometo ponerle empeño e ilusión.



Con el blog quiero cumplir ciertos objetivos:

- Informar acerca de mis andanzas por el mundo. No se trata de subir fotos de paraísos terrenales y decir "mamá, sigo vivo", sino de sacar unas horas a la semana para transmitir lo recogido en un diario que pretendo ir rellenando en la medida de lo posible. Intentar ir más allá de la descripción objetiva y poder comunicar sensaciones y experiencias. Escribir algo que permanezca, y de aquí a diez años lo pueda leer y rememore esos instantes.

- Aclarar ideas, expresarme mejor y mejorar mi riqueza del idioma castellano, subir un nivel en el conocimiento del español. Seis años en Alemania y cuatro de ellos trabajando han hecho que mis competencias de comunicación en mi lengua materna sean bastante limitadillas, y esto hay que solucionarlo. Aber sofort.

- Por qué no, aprender del tema blogs y páginas web: herramientas disponibles, administración de contenidos, fomento de la creatividad, avance en conocimientos de diseño gráfico, etc.

- Generar interés entre los lectores. Vale que no estarán esperando a mi siguiente contribución como al sexto libro de Canción de Hielo y Fuego (a.k.a. la saga de Juego de Tronos), pero sí aspiro a que echéis de menos la publicación semanal. Esto ya es algo más difícil, pero no ponerme un objetivo que dependa solamente de mí o me tenga a mi como target no sería suficiente reto.

Es un placer compartir este viaje con todos vosotros. ¡Comenzamos!